FINAL FANTASY XV

LA FANTASÍA QUE NO QUIERE TENER FINAL

Tras varios años de desarrollo y múltiples retrasos, cambios en la plataforma donde iba a ser lanzado y un cambio de nombre de juego, la mítica saga de juegos de rol japonesa Final Fantasy lanza su nueva entrega que está disponible para PlayStation 4 y Xbox One desde el 29 de Noviembre.

En un comienzo, Final Fantasy XV iba a ser un  spin-off del polémico y criticado Final Fantasy XIII y su nombre era «Final Fantasy Versus XIII».  El director de este proyecto inicialmente era Tetsuya Nomura, reconocido diseñador de personajes con gran trayectoria en Square, y este mismo sería lanzado exclusivamente para Playstation 3.

Después de varios problemas en el desarrollo y retrasos, en 2012 se decide que el juego iba a ser lanzado en la octava generación de consolas (PS4, Xbox One), y tras varias ausencias en las mayores convenciones de videojuegos mundiales, finalmente en el año 2013 se hace oficial que este juego va a ser el siguiente lanzamiento principal de la longeva serie de videojuegos: Final Fantasy XV.

La espera ha sido larga, demasiado larga, quizás, pero han sabido aprovechar todo este tiempo, ya que estamos frente a una de las experiencias más completas e interesantes que jamás se hayan creado en un juego.

HISTORIA

En el vasto y variado mundo de Eos, existe un imperio opresor llamado Niflheim que domina a todas las naciones. A todas excepto a una: El reino de Lucis. El juego comienza en medio de unas supuestas negociaciones de paz entre los dos mencionados imperios, que ya han visto pasar varios años de guerra. El imperio de Niflheim aparenta tener intenciones de un cese al fuego y de hacer un tratado de paz, pero en realidad todo es una trampa y el reino de Lucis es vilmente traicionado al mostrar sus mejores intenciones, y es acá donde comienza la travesía del príncipe Noctis, el protagonista de Final Fantasy XV.

Nuestro personaje principal es el heredero al trono de Lucis, y al enterarse de la traición hecha a su padre, intentará por todos los medios necesarios reclamar el trono que le pertenece y devolver equilibro al mundo. Recorriendo Eos junto a sus grandes amigos: Ignis, Prompto y Gladiolus, el príncipe Noctis vivirá la aventura de su vida en este mágico mundo abierto que nos ofrece la nueva fantasía de Square-Enix.

GAMEPLAY

La jugabilidad en el nuevo Final Fantasy cambió bastante respecto a todos sus predecesores. Se nos presenta un mundo abierto que se puede explorar con total libertad (excepto cuando entramos en alguna de las misiones principales de la historia), cuenta con un sinfín de side quests, batidas de caza, búsquedas de tesoros, entre otras muchas actividades que el jugador puede realizar a su mejor parecer para conseguir dinero o experiencia para subir de nivel. Para movilizarnos en este amplio mapa, contaremos con un vehículo llamado Regalia, un lujoso carro deportivo heredado del padre de Noctis, que hará de cierta manera más cortos los trayectos que tendremos que realizar por lo menos una vez en su totalidad. También podremos andar con los tradicionales Chocobos, lo cual hace que explorar lugares en los que no se puede utilizar el Regalia no sea tan tedioso debido a las largas distancias que se deben recorrer. A pesar de ser una adición muy buena, la conducción se ve como algo muy limitado. Si se pensaba en algún momento que podríamos manejar el carro por el pasto, corretear personas, atropellar chocobos o simplemente querer salirse de la carretera, nada de esto es permitido por el juego, el cual simplemente nos permite conducir en cierto límite de velocidad y únicamente por las carreteras que hay dentro del mapa del juego.

Cada personaje cuenta con una afición específica; Noctis puede practicar pesca, Prompto documenta todo el viaje tomando fotos las cuales se pueden seleccionar siempre que llevamos al grupo a descansar, Ignis se encarga de alimentar al grupo creando recetas a medida de que se van probando nuevos platos o simplemente reuniendo nuevos ingredientes para crearlos, y Gladiolus tendrá afición por actividades de supervivencia. Cada una de ellas se irá desarrollando dependiendo de las acciones que tengamos durante cada jornada.

El sistema de batalla es muy diferente, igualmente, a lo que nos tenía  acostumbrados Square-Enix en el pasado. El antiguo sistema de batallas por turnos queda en el pasado, siendo reemplazado por un trepidante y frenético sistema de batalla enfocado hacia la acción, donde el jugador tendrá que estar bien concentrado en el ritmo de la batalla, y ser lo suficientemente rápido para bloquear los ataques enemigos oportunamente. Se pueden alternar entre 4 diferentes tipos de armas, también siendo posible equipar dentro de estas 4 opciones alguna de las magias que se pueden ir creando.  No tenemos control directo sobre lo que nuestros compañeros de viaje hacen durante las peleas, solo podemos controlar un ataque especial que puede hacer alguno de ellos cuando se llena una barra. Esto es algo extraño ya que anteriormente en estos juegos uno podía controlar cada una de las acciones de cada personaje, pero no por ello quiere decir que sea malo. Por el contrario las rápidas e inmersivas batallas hacen del juego algo muy interesante y novedoso. Lo único negativo de estas mismas que se puede mencionar, es que la cámara muchas veces se mueve caóticamente, metiendo en el campo de visión del jugador objetos que bloquean la visibilidad , por ejemplo árboles, o dentro de espacios cerrados la cámara muchas veces no se ajusta como debería.

Para acumular experiencia se debe ganar combates, cumplir quests, hacer encargos, tomar fotos, entre otro tipo de tareas, pero no se logrará subir de nivel hasta que los personajes vayan a dormir. Después de cada jornada de actividades del juego, se debe ir a descansar para así poder asimilar la experiencia adquirida durante el día y lograr subir el nivel de los personajes. Este enfoque hacia el realismo también  se puede ver reflejado en que nuestros personajes también tienen que comer durante su travesía, algo nunca antes visto en ningún juego de Final Fantasy.

El sistema de progresión se desarrolla mediante puntos de habilidad (PH), que iremos ganando a medida que se cumplen los diferentes quests o derrotemos enemigos, y se debe tener cierto cuidado a la hora de escoger las habilidades que cada árbol de habilidades nos ofrece, ya que bien entrado en la historia podría acarrear problemas si no se eligen cuidadosamente.

GRÁFICOS Y  SONIDO

Está bien claro que la factura y cuidado por los detalles siempre ha sido una de las características que ha tenido Square-Enix a la hora de desarrollar cada nuevo título de Final Fantasy, y en esta ocasión no es una excepción. A pesar de que el estilo de personajes, su vestuario o incluso su manera de actuar no sean del agrado de todos, se debe decir que la dirección de arte en Final Fantasy XV es excelente. Gráficos muy pulidos, animaciones muy detalladas y modelos realizados con gran minucia están a la orden del día en cualquier rincón del mundo de Eos. Los problemas con la cámara hacen que los combates sean frustrantes en muchos momentos, pero de todas maneras no logra opacar para nada el trabajo hecho por el estudio Japonés.

La banda sonora orquestada, ambienta con total armonía y perfección el mundo fantástico y las batallas épicas que Noctis y compañía hacen durante todo el juego, y pese a la ausencia del antiguo compositor de las bandas sonoras de la mayoría de lanzamientos anteriores, Nobuo Uematsu, el equipo que ha tomado su lugar ha logrado reemplazar al antiguo maestro de una forma magistral. Igualmente, el fan service está presente también, ya que en el Regalia podremos escuchar las bandas sonoras de todos los anteriores juegos de Final Fantasy, las cuales podremos ir comprando en las tiendas que vamos visitando mientras se avanza en el juego.

CONCLUSIÓN

En el segmento introductorio del juego aparece una frase que es muy acertada para hacer una introducción a Final Fantasy XV, “A los jugadores de siempre y a quienes hoy descubren Final Fantasy”; este es un juego que fascinará tanto a antiguos fans de la serie, como a nuevos jugadores por igual. El sistema de combate que alguna vez fue tan criticado y usado como excusa para que muchos no le dieran la oportunidad a los juegos de esta fascinante saga, ya no es un impedimento para que no puedan jugarlo.

Final Fantasy XV no es perfecto, pero sin duda alguna ha logrado realizar unas de las mayores aventuras de la presente generación de consolas, logrando enganchar desde el primer minuto de juego, y que por fuera de la historia principal tiene muchísimas horas de juego adicionales que mantendrán a los jugadores pasando horas y horas frente a su consola de preferencia por un largo tiempo.

LO BUENO:

Gráficos excelentes, escenarios detallados y mapa vasto y variado.

Modo de juego e historia que logran enganchar.

La banda sonora logra ambientar perfectamente la aventura épica.

Los combates rápidos y con enfoque hacia la acción.

LO MALO:

La cámara puede ser bastante frustrante en ciertos combates y en espacios cerrados.

La historia podría haber sido un poco más larga.

Se siente que hace falta un poco de profundidad en los personajes secundarios.