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El próximo 24 de marzo del 2020 saldrá al mercado Bleeding Edge, el nuevo brawler 4vs4 de Ninja Theory y Xbox Game Studios. Todos aquellos que adquirieron el juego en preventa o que cuentan con una membresía a Xbox Game Pass tuvieron acceso exclusivo a la beta cerrada para jugar en línea desde el 14 hasta el 17 de febrero del 2020.
En Gamers-On tuvimos la oportunidad de probar el juego y estas son nuestras impresiones:
A pesar de ser una entrega en tercera persona, es imposible evitar que desde el primer contacto hagamos comparaciones con Overwatch, la estética, los modos de juego y el tipo de combate a corta distancia nos recuerdan inmediatamente a la obra de Blizzard. Esto se hace más evidente cuando pensamos en el diseño visual de los personajes, eso sí, esto no significa que no estén bien logrados, todo lo contrario, cada uno cuenta con sus conceptos propios y un estilo grafico que resulta muy divertido.
Alejándonos de las similitudes, tenemos que decir que Bleeding Edge brilla por su increíble jugabilidad. Los personajes cuentan con un ataque básico, con el cual podemos enlazar cadenas de combos como si se tratara de un hack & slash; ataques especiales que se van recargando durante la partida y un conjunto de habilidades diferenciadas.
En cuanto a las posibilidades de personalización son muy variadas y van desde lo cosmético hasta lo funcional, podremos modificar profundamente a nuestro personaje, cambiando características como la vida, las habilidades, los poderes especiales, el daño, los efectos, entre muchas otras.
En la beta tuvimos la oportunidad de probar únicamente dos modos de juegos, un modo de control de objetivos y un modo de recolección de energía. El primero es la clásica mecánica de control de territorios, allí debemos ir con nuestro equipo y ocupar ciertas zonas repartidas por el mapa, quien más tiempo este en las zonas ganará la partida; el segundo modo nos obliga a buscar unos contenedores de energía para después depositarlos en un lugar particular.
Al igual que en otros juegos de este tipo, el truco para la victoria está en la creación de grupos equilibrados donde haya personajes de ataque, de soporte y el clásico “tanque”. Estamos ante una propuesta muy atractiva para el juego en equipo y Ninja Theory lo sabe, es por eso que se cuenta con sistemas de marcado de objetivo y herramientas de comunicación para hacer advertencias al resto del grupo o emitir una orden.
Por lo pronto, Bleeding Edge es una propuesta interesante que aun requiere de trabajo para diferenciarse realmente de lo que ya hay en el mercado. Es precisamente en su amplio margen de customización y sus mecánicas de juego donde puede generarse el sello propio que necesita para no quedarse simplemente como un juego inspirado en Overwatch. Puedo decirles que con todo el frenetismo y la personalidad que tiene va por muy buen camino.
Tendremos una nueva oportunidad de probar el título en una segunda beta cerrada que se llevará a cabo entre el 13 y el 16 de marzo del 2020.
